¿Cómo hacer un buen cunnilingus? Aunque cada persona es diferente aquí os dejo algunos tips para tener en cuenta
Crea un ambiente íntimo, tranquilo y a la vez erótico: velas, música, luz tenue… Acaricia todo el cuerpo y ve acercándote poco a poco a los genitales. Aquí podéis emplear algún aceite para masaje (¡cuidado con los preservativos!)
Cuando utilices la boca hazlo igualmente de forma progresiva para aumentar la excitación. Una vez pases a la vulva ve primero a las ingles, labios externos e internos y finalmente el clítoris.
Para la zona de los labios externos e internos utiliza la lengua más plana y larga, no dura, con movimientos largos. Lame y mordisquea (¡con cuidado!) los labios externos e introduce los labios internos en tu boca y succiónalos.
Con la excitación el clítoris se llena de sangre y se agranda. Chúpalo, prueba de forma más suave o con más presión ¡No hay prisa! Hay mujeres a las que les molesta que le toquen directamente el clítoris y prefieren una estimulación menos directa alrededor. Fíjate en la respiración, gemidos y los movimientos de tu pareja, cómo va colocando las caderas o si abre las piernas.
Cuando tengas ese movimiento que le genera más excitación ve cambiándolo y finalmente mantenlo y hazlo más fuerte y rápido para alcanzar el orgasmo. Si cambias mucho de movimiento con la excitación alta, esta puede disminuir. Prueba lamidas más cortas o largas, más o menos lentas, en círculos, arriba-abajo, izquierda-derecha.
Cuando la vagina esté lubricada prueba a introducir algún dedo para estimular el punto G mientras sigues lamiendo la vulva.
Hazlo para disfrutar, no para conseguir el orgasmo de tu pareja, de esta forma estará más relajada y le ayudará a excitarse y descontrolar. Sobre todo mucha, mucha comunicación.
Recuerda que con el sexo oral también se pueden transmitir infecciones, protégete mediante una barrera bucal.